El comunicador y vecino de Zeballos Cué, Eduardo Segovia, denunció que la comunidad está expuesta a la delincuencia y mucha violencia, por lo que exigen la destitución de todos los policías de la zona y la implementación de un nuevo sistema de seguridad, ya que el actual no ofrece resultados efectivos.
Dijo que la presencia de microtraficantes es constante, y según Segovia, su primo fue víctima de un ataque luego de enfrentarse a estos delincuentes, que hicieron ocho disparos y uno de ellos le dio en el abdomen, por lo que ahora “se encuentra en terapia intensiva”.
El agresor ya había disparado en plena vía pública en una ocasión anterior, pero pese a haber denunciado el hecho a la comisaría, las autoridades no tomaron medidas. “Cada vez que entra un nuevo comisario, le explicamos la situación, dicen que van a ayudar, pero luego no hacen nada”, lamentó.
“Parece que tiene que morir alguien para que actúen. Después del ataque a mi primo, recién comenzaron a intervenir, pero los policías vienen, dispersan a todos y luego se van, permitiendo que los delincuentes vuelvan”, relató.
Segovia propone que se establezca una vigilancia policial permanente en el barrio, con personal fijo y casetas en puntos estratégicos. Criticó que los oficiales solo brindan seguridad a supermercados y estaciones de servicio porque reciben propinas, mientras que los vecinos siguen desprotegidos.
Denunció que el comisario amenazó con demandarlo tras cuestionarle por qué prioriza esos establecimientos en lugar de patrullar el barrio. Afirmó que el problema persiste a pesar de los cambios de comisarios, ya que la estructura delictiva sigue intacta.
“Es imposible que los policías no sepan quiénes son estos adictos. Este es un barrio peligroso y cuesta creer que no puedan poner una patrullera para hacer controles. Nos sentimos desprotegidos, vivimos en la impunidad. Cuando hice mi denuncia, el comisario solo respondió: que Yo solo me plagueo”, reclamó.
Ante esta situación, los vecinos convocan a una reunión para este jueves a las 20:00 en la Plaza Zeballos, donde exigirán el cambio de todo el personal policial y la implementación de un nuevo sistema de seguridad para la comunidad.