Ante la necesidad de aumentar la cantidad de médicos especialistas en Terapia Intensiva, se había promulgado una ley que establece una bonificación equivalente a un salario mínimo mensual para quienes decidan seguir dicha especialidad.
A pesar de que la norma está vigente, hasta el momento los terapistas no vieron un solo guaraní. Las autoridades argumentan que no hay recursos, “pero los congresistas no dudan en aumentarse beneficios superfluos, como el seguro VIP, el cupo de combustible VIP o la jubilación VIP”.
La Dra. Rossana González, presidenta del Sindicato Nacional de Médicos, señaló que evaluarán medidas de fuerza para frenar el despilfarro y exigir que se priorice la salud sobre la opulencia de los parlamentarios.
