El senador Colym Soroka dijo que estos chats (en los aparatos del exdiputado Lalo Gomes) “revelaron datos sorprendentes”. Comentó que en el portón de su vivienda le dejaron “como una amenaza”, dos balas de 9 milímetros. Explicó que comunicó a los organismos de seguridad cuando ocurrió hace cinco meses aproximadamente, “pero no quería que esto se haga público”.

El senador señaló que sospecha de donde provendría la amenaza. “Acá estamos hablando del crimen organizado. Y el crimen organizado en Paraguay está en todas partes”. Aseguró que no le amedrentarán con estas prácticas, aunque reconoció que tomó medias de cuidado.

Con todo lo que está pasando, “la fiscalía es la que tiene mayor duda con relación a su trabajo”. Agregó que “los chats dejó sorprendida a la ciudadanía y no hay que matar al emisario”, en relación con quienes publicaron los mensajes.