La liberación incondicional de los rehenes en manos de Hamás sigue siendo la clave para que Israel considere un alto el fuego en Gaza. Así lo ha reiterado el primer ministro israelí, Netanyahu, añadiendo que una vez finalizada la guerra garantizará la gestión global de la seguridad en la Franja por tiempo indefinido.
El enfrentamiento entre Israel y la ONU
Pero mientras tanto, la situación humanitaria de los civiles palestinos sigue siendo dramática: según Hamás, hay 10 000 víctimas en la Franja, que se ha convertido en un «cementerio de niños», según el secretario general de la ONU, Antonio Guterres. La reacción de Israel no se hizo esperar, y por boca de su ministro de Asuntos Exteriores, Eli Cohen, replicó: «Qué vergüenza. Es Hamás el problema en Gaza – añadió Cohen – y no las acciones de Israel para eliminar a esta organización terrorista». Guterres, por su parte, siguió pidiendo un alto el fuego inmediato e instó a las dos partes beligerantes a cumplir «sus obligaciones en virtud del derecho internacional humanitario: esto significa la liberación incondicional de los rehenes en Gaza, el cese del uso de civiles como escudos humanos y la rápida entrada de ayuda humanitaria» en la Franja, desde alimentos hasta combustible.
Decenas de víctimas sobre el terreno
El ataque israelí contra las bases de Hamás continúa: el ejército ha anunciado que ha neutralizado a otro comandante del grupo islamista. Por su parte, Hamás informó de que al menos 14 personas murieron durante la noche en ataques israelíes en Rafah, en el sur de la Franja, mientras que la Media Luna Roja palestina informó de un ataque aéreo israelí cerca del hospital Al Quds de la ciudad de Gaza. También se produjeron enfrentamientos en Cisjordania, donde el ejército israelí mató a un palestino de 24 años en el pueblo de Sair, cerca de Hebrón, en Cisjordania. Y mientras llegaban de Rafah casi 100 camiones con productos de primera necesidad, se rompió el acuerdo en el Consejo de Seguridad de la ONU para una resolución sobre Oriente Medio. Mientras tanto, Estados Unidos planea enviar a Israel bombas de precisión por valor de 320 millones de dólares, pero insiste en que el primer ministro Netanyahu haga más para proteger a los civiles de Gaza.
Fuente: Vatican News