Su Santidad, en la catequesis de hoy, invitó a los feligreses a “orar como hijos de Dios, no como esclavos”, fundamentado en que ese “deseo de orar” deviene del don Espíritu Santo.

 

“Orar como hijos de Dios, no como esclavos, hay que orar siempre con libertad. Tú oras cuando el Espíritu Santo te ayuda a orar, oras cuando sientes en el corazón la necesidad de orar, y cuando no sientes nada, entonces te detienes y te preguntas: ¿por qué no escucho el deseo de orar? ¿Qué pasa en mi vida?”, reflexionó el Santo Padre.

 

Por este motivo, instó a rezar para recibir el Espíritu Santo, que nos da el ánimo para seguir adelante.