La abogada Marlene Orué denunció la represión policial sufrida tras la representación teatral que realizaron en memoria de Rodrigo Quintana. Aclaró que no se trató de una manifestación, sino de un acto simbólico para recordar al joven liberal asesinado hace 8 años.

Orué señaló que aún sienten el impacto de la violencia ejercida por miembros de la Policía Nacional. Explicó que la representación teatral se realizó en la sede del PLRA por la mañana, donde un actor, caracterizado como el espíritu de Rodrigo Quintana, cargaba un cuerpo en alusión al momento en que fue asesinado.

“Un grupo de actores jóvenes recrearon cómo el espíritu de Rodrigo sigue vivo. La escena representaba su llegada a la sede del partido, donde cae tras el disparo y deja un mensaje poético: Los muertos gozan de buena memoria, seguimos haciendo justicia”, relató.

Luego, el grupo se trasladó a la sede de la Fiscalía, donde realizaron la misma representación y recitaron un poema. Posteriormente, se dirigieron al Poder Judicial con la intención de entregar una nota y los libros escritos sobre el asesinato de Quintana para que fueran ingresados al Museo de la Justicia.

“Ya que no tenemos justicia, al menos que su memoria siga viva y que su lucha sirva como ejemplo para que estos hechos no vuelvan a ocurrir”, expresó Orué.

Sin embargo, la policía impidió que subieran las escaleras del Poder Judicial. “El comisario nos dijo que había una acordada que prohibía realizar actos en la escalinata. Es absurdo que en un espacio público, donde todos los días hay protestas y personas encadenadas, a un grupo reducido como el nuestro no se le permitiera realizar una representación de apenas un minuto antes de entregar la nota y los libros”, reclamó.

Orué denunció que, pese a que el Poder Judicial es un espacio abierto al público, a ellos, siendo abogados y teniendo una visita agendada, se les negó el ingreso. “La cantidad de policías era desproporcional, como si esperaran una gran manifestación, cuando en realidad solo éramos 15 personas”, concluyó.