El Papa Francisco, protagonizó un hecho histórico el pasado viernes 14 de junio, convirtiéndose en el primer Papa en participar en la reunión de líderes de las 7 economías más avanzadas del mundo. En su discurso sobre la Inteligencia artificial, el sucesor de Pedro, señala la necesidad de introducir algo que acuñe como “algorética”. ¿De qué se trata? ¿Qué otros puntos trató en dicho evento?, te explicamos en el siguiente artículo:
1. “Algor” + “ética”
Haciendo ese juego de palabras de “algor” partícula que pertenece a la palabra “algoritmo”, que hace referencia al conjunto de instrucciones diseñadas para que una máquina realice tareas específicas de manera autónoma y eficiente (la IA).
A esto el Papa suma la “algorética”, que actuaría como “moderador” y filtro de aquella información recopilada por el algoritmo. De esta manera, no solo toma los resultados de una acción, sino también los valores y deberes involucrados. En un contexto global diverso, busca encontrar principios compartidos para resolver dilemas éticos y conflictos.
2. La IA no es buena ni mala en sí misma
El Papa empezaba su discurso reflexionando sobre el origen de la Inteligencia Artificial, un tema que genera mucha inquietud y polarización, que en sí misma no es buena ni mala, parte de la creatividad del ser humano y la misma deviene del Padre Creador.
Esta revolución tecnológica puede democratizar el conocimiento y aliviar trabajos pesados, pero también puede aumentar la desigualdad y amenazar la «cultura del encuentro» en favor de una «cultura del descarte». Subrayó que el desarrollo tecnológico debe orientarse al servicio de la humanidad.
3. Elección y decisión
El Sumo Pontífice hace una distinción la acción de “elegir” y “decidir”, atribuyendo a esta última cualidad como inherente y exclusiva al ser humano. “Lo que hace la máquina es una elección técnica entre varias posibilidades y se basa en criterios bien definidos o en inferencias estadísticas”, describe el Papa, por otro lado, el ser humano “no solo elige, sino que en su corazón es capaz de decidir. La decisión es un elemento que podríamos definir como el más estratégico de una elección y requiere una evaluación práctica”. Y finalmente es quien da la última directriz.
4. Proteger a la Dignidad Humana
“Condenaríamos a la humanidad a un futuro sin esperanza si quitamos a las personas la capacidad de decidir por sí mismas y por sus vidas, condenándolas a depender de las elecciones de las máquinas”, Papa Francisco.
Sostiene la necesidad de generar un control humano significativo sobre las decisiones de la inteligencia artificial para preservar la dignidad humana. En conflictos, expresa el Papa, que se debe prohibir el uso de armas autónomas letales. “Ninguna máquina debería elegir jamás poner fin a la vida de un ser humano”.
5. “Ninguna innovación es neutral”
El Papa señala que ninguna innovación tecnológica es neutral, ya que siempre conlleva un propósito y una disposición de poder que influye en las relaciones sociales. Esta dimensión de poder refleja la visión del mundo de sus creadores. Para que los programas de inteligencia artificial contribuyan al bien común y a un futuro mejor, deben estar guiados por principios éticos y orientados al bienestar de todos los seres humanos.
6. La política como forma de caridad
El Papa advierte que la inteligencia artificial puede limitar la visión del mundo a datos cuantificables y categorías predefinidas, eliminando otras formas de comprensión. Este enfoque puede llevar a un «paradigma tecnocrático», más peligroso, que sustituya la diversidad de pensamiento y la intervención política necesaria para el bienestar común.
Resalta la urgencia de una «sana política» para evitar estos riesgos, destacando que la política es esencial para la fraternidad universal y la paz social. Citando la encíclica Fratelli tutti, señala: “para muchos la política hoy es una mala palabra… ¿Puede funcionar el mundo sin política? No. ¿Puede haber un camino eficaz hacia la fraternidad universal y la paz social sin una buena política?”. Subraya la necesidad de una política que opere bajo grandes principios y busque el bien común a largo plazo, integrando diversos sectores y conocimientos.
Y citó “La política es la forma más elevada de la caridad, es la forma más elevada del amor”. La política sirve.