La ANDE se pronunció sobre un caso en el que una madre debía recibir la indemnización de 400 millones de guaraníes tras la muerte por electrocución de su hijo. Sin embargo, el monto asignado no llegó completamente a los beneficiarios.
Los principales sospechosos fueron imputados. Se trata de los representantes legales encargados de gestionar la indemnización. La ANDE afirma haber cumplido con todas las normativas vigentes y que no tuvo participación en el manejo irregular del dinero.
El Dr. Nelson Medina, asesor jurídico de la ANDE, aseguró que “la institución entregó los cheques conforme a la ley y que su responsabilidad terminó al hacerlo”. Aclaró que los cheques no eran transferibles, pero fueron percibidos por terceros, “y eso escapa de la responsabilidad de la ANDE”.
Medina explicó que los cheques fueron entregados a un representante con poder legal, que fue validado por los abogados de la ANDE. Este poder solo autorizaba al apoderado a retirar los cheques, pero no a cobrarlos. Al ser no transferibles, solo los beneficiarios legítimos debían haber cobrado el dinero.
“Había dos poderes: uno para gestionar la indemnización con la ANDE y otro para retirar el cheque a nombre de la familia, y posteriormente el dinero en el Banco de Fomento”, añadió Medina.
También mencionó un caso similar, en el que una niña falleció al tocar un alumbrado público en la Costanera. Medina aclaró que no siempre estos incidentes son responsabilidad de la ANDE, y en este caso particular, la niña entró en contacto con un alumbrado ornamental que no pertenece a la institución.
