La Transfiguración de Cristo, es un evento narrado en los Evangelios de Mateo, Marcos y Lucas, donde Jesús revela su gloria divina a Pedro, Juan y Santiago en el monte Tabor.
En esta montaña, Jesús se transfigura, su rostro resplandece y sus ropas se tornan blancas y radiantes, mientras Moisés y Elías, aparecen conversando con Él.
Este evento se realiza en el monte Tabor, un lugar elevado cuyo nombre significa “el abrazo de Dios”.
La Transfiguración tiene lugar como una confirmación de la divinidad de Jesús y anticipa su futura glorificación tras su sufrimiento y muerte en Jerusalén. La voz de Dios desde una nube declara a Jesús como su Hijo amado.
Los apóstoles, asombrados, desean permanecer en el lugar de gloria, pero Jesús les advierte que no revelen la visión hasta después de su resurrección.