El Toxoplasma gondii es un parásito que puede afectar a todos los animales de sangre caliente. Los gatos en particular la adquieren al consumir heces contaminadas o carne de roedores (aves, entre otros).
La veterinaria, Yolanda Chilavert comentó que existen varias formas de transmisión de este parásito a los humanos, entre ellos, el consumo de carne mal cocida, agua o verduras contaminadas y puede infectarse a través de un gato, si es que las heces del felino hacen contacto con la boca de la persona.
Señaló que de nada sirve culpar a las mascotas si no se tiene una buena higiene en la vida cotidiana, ya que esta es la mejor forma de prevenir dicha enfermedad. “No solo los gatos pueden ser los portadores”, dijo la profesional.
El Toxoplasma gondii puede causar la toxoplasmosis y sus síntomas son, inflamación de las glándulas, fiebre, dolor de cabeza, dolores musculares o cuello rígido. Si bien los datos señalan que solamente el 10% de las mujeres infectadas con el parásito tiene síntomas perceptibles, mucho dependerá del sistema inmune.
Pero en el desarrollo del bebé en gestación puede significar la pérdida de la audición, afectación en la capacidad mental y ceguera, que podría desarrollarse en el transcurso de los primeros años de vida.