TIEMPO DE NAVIDAD

Evangelio según San Juan 1, 29-34 

“Éste es el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo“

Juan Bautista vio acercarse a Jesús y dijo: “Éste es el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo. A él me refería, cuando dije: Después de mí viene un hombre que me precede, porque existía antes que yo. Yo no lo conocía, pero he venido a bautizar con agua para que él fuera manifestado a Israel”. Y Juan dio este testimonio: “He visto al Espíritu descender del cielo en forma de paloma y permanecer sobre él. Yo no lo conocía, pero el que me envió a bautizar con agua me dijo: “Aquel sobre el que veas descender el Espíritu y permanecer sobre él, ése es el que bautiza en el Espíritu Santo”. Yo lo he visto y doy testimonio de que él es el Hijo de Dios”. Palabra del Señor.

Meditación

     Vivamos en la tierra según el modelo del cielo. Nos enseña San Bernardo que Cristo trajo en la tierra el magisterio de la doctrina celestial, cuando nos fue revelada una cierta imagen visible de la Jerusalén de lo alto, que es nuestra madre, y una visión de su desborde de belleza (Sermón 27, 7-9). Para ello es necesario que descienda el Espíritu en forma de paloma, viento o fuego, enviado por el Padre y el Hijo.

Según Papa Francisco, la experiencia del Bautista, inspirado desde lo alto, es una visión donde se quita el pecado del mundo (1,29). Cristo quita, que significa literalmente aliviar, tomar sobre sí. Para ello vino Jesús con una misión precisa: libertar al mundo de la esclavitud del pecado, a nacer, acompañar al hombre, cargar sobre sí las culpas de la humanidad … Amando. No hay otro modo de vencer el mal y el pecado si no es con el amor que impulsa al don de la propia vida por los demás.

Todo lo contrario, cuando las tecnologías que usan gran número de algoritmos pueden extraer, de los rastros digitales en internet, datos que permiten controlar los hábitos mentales y relacionales de las personas con fines comerciales o políticos, con frecuencia sin que ellas lo sepan, limitándoles el ejercicio consciente de la libertad de elección. Necesitamos pues de la buena información ante el uso de la Inteligencia artificial.

 

¡Los confines de la tierra han contemplado la salvación de Dios!

Los confines de la tierra han contemplado

la salvación de nuestro Dios

Aclama al Señor, tierra entera,

griten, vitoreen, toquen.

Gentileza, Arzobispado de Asunción